Santa Fe reforzó la vigilancia epidemiológica tras la confirmación de un caso de sarampión en Entre Ríos, correspondiente a un niño de dos años que había permanecido 24 horas en la ciudad de Casilda días antes del inicio de los síntomas. El Ministerio de Salud provincial inició acciones coordinadas con autoridades locales y de la provincia vecina para reconstruir posibles cadenas de contacto, verificar la cobertura de vacunación y aplicar medidas de bloqueo.
El operativo incluye la identificación de personas expuestas, revisión de actividades realizadas por el menor durante su estadía, control de esquemas de inmunización y refuerzo de la alerta a efectores públicos y privados para la notificación urgente de síndromes febriles exantemáticos.
La directora provincial de Promoción y Prevención, Analía Chumpitaz, explicó que la confirmación llegó el 5 de diciembre y detalló: “Nos pusimos en contacto inmediatamente con la provincia de Entre Ríos y nos confirmaron que diez días previos al inicio de los síntomas había estado durante 24 horas en la localidad de Casilda”.
La funcionaria señaló que se activó el protocolo para descartar un contagio local: “Buscamos el caso cero y no existe, debido a que el niño estuvo durante esas 24 horas solamente con su mamá. Eso nos da tranquilidad por un lado, pero de todas maneras reforzamos la inmunización en ese barrio y en toda la localidad”.
Chumpitaz recordó la importancia de los esquemas de vacunación: “La vacuna es obligatoria, gratuita y está disponible en todos nuestros vacunatorios. Toda persona desde el primer año de vida debe tener dos dosis”. También destacó la investigación del traslado del menor: “Se trasladaron en un remís, el remisero es de Santa Elena y al llegar a Casilda no salieron porque se enteraron del fallecimiento de su abuela”.
La funcionaria aclaró que el protocolo se mantiene activo: “Hasta el momento no tenemos casos sospechosos, pero es necesario que médicos y pediatras se sensibilicen y notifiquen cualquier síndrome febril exantemático”.
Sobre la eficacia de la vacunación, indicó: “El efecto no es inmediato, pero en 15 o 20 días comienzan a aumentar los anticuerpos”, y recomendó evitar viajes a zonas con brotes: “Si no están inmunizados, es preferible no trasladarse a esos lugares”.
Asimismo, remarcó la importancia de completar los esquemas en todas las edades: “Los adolescentes y adultos deben tener dos dosis. En el caso de haber tenido sarampión, se considera que la persona está inmunizada, pero igualmente debe controlar el resto de sus vacunas”.