Unión puso punto final a su anteúltima semana de entrenamientos del año en Casa Unión, en medio de un clima donde el trabajo es casi simbólico y las definiciones para 2026 empiezan a marcar el pulso del plantel. Este viernes fue el último encuentro antes del descanso de fin de semana, con regreso previsto para el lunes y la mira puesta en las vacaciones y el inicio de la pretemporada el 2 de enero.
Lautaro Vargas continúa realizando movimientos específicos por un esguince de rodilla (no hubo parte médico todavía). El resto del grupo se movió con liviandad, consciente de que lo más importante ya no pasa por la pelota, sino por las decisiones que vienen.
En los despachos se cocina lo que definirá el futuro: la lista de jugadores con contrato que serán tenidos en cuenta por Leonardo Madelón y aquellos que quedarán al margen, además de los vínculos a renovar de quienes finalizan su acuerdo. Todo en un escenario que obliga a actuar rápido, porque el Apertura se jugará tras una pretemporada muy corta.
Así el plantel transita los últimos días antes del receso, la gran incógnita sigue siendo el lugar donde se llevará a cabo la preparación. Las opciones que hoy parecen tomar fuerza son Montevideo y Mar del Plata, aunque la decisión todavía no fue oficializada. Madelón y la dirigencia buscan sellar ese punto cuanto antes, sabiendo que el reloj ya empezó a correr.