En un juicio abreviado, un hombre fue condenado por la muerte de Florencia Rosales. Se trata de la mujer que se cayó de la moto al pasar por el badén de López y Planes y Ecuador hace seis años.
Florencia iba acompañando a su pareja, quien aceptó una condena de tres años de cumplimiento condicional, cinco años de inhabilitación para conducir vehículos, reglas de conducta y una reparación económica.
Tanto la madre de Florencia como su tía, aseguran que la joven sufría violencia de género, pero no tuvieron pruebas, por lo que la condena fue por homicidio culposo.
La fiscal Rosana Marcolín es quien reabrió la causa que ya había sido cerrada.
"Mi hija luchó por tres años, porque el novio la tiró de la moto. Estuvo mucho tiempo en terapia intensiva y en diciembre se van a cumplir cuatro años de que murió", agregó la mujer.
También declaró que el acusado ejercía una gran manipulación sobre Florencia que provocó que nunca contara nada ni lo denunciara, pero que las marcas en su cuerpo eran evidentes.
"La causa estaba cerrada por lesiones leves, a pesar de que ella tenía traumatismo de cráneo y estuvo cuatro años postrada. No hubo justicia para ella. No tuvimos pruebas para comprobar que sufría violencia de género y que él la tiró de la moto, porque él iba manejando y ni él ni la moto se hicieron nada", detalló la tía.