Roscoe acompañaba habitualmente al siete veces campeón del mundo en los circuitos, donde conquistó la simpatía de todos hasta el punto de tener su propia cuenta de Instagram, con miles de seguidores.
Hace unos días, Hamilton había revelado que Roscoe sufría problemas respiratorios a causa de una neumonía. Fue ingresado de urgencia y, aunque los médicos lograron reanimarlo tras un paro cardíaco, quedó en coma. Tras cuatro días en cuidados intensivos, el piloto británico confirmó la triste noticia en redes sociales:
“Tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida y despedirme de Roscoe. Luchó con todas sus fuerzas hasta el último momento. Estoy agradecido y honrado de haber compartido mi vida con un alma tan hermosa. Traerlo a mi vida fue la mejor decisión que he tomado, y siempre atesoraré los recuerdos juntos”.
Debido a esta situación, Hamilton no pudo participar en el test de neumáticos de Pirelli en Mugello, donde fue reemplazado por Guanyu Zhou junto a Charles Leclerc. Ahora, el británico regresará a la pista en el Gran Premio de Singapur, seguramente conmovido por la pérdida de su inseparable amigo.