Las mujeres obesas corren el peligro de sufrir problemas en el embarazo, en el parto y en la salud del bebé. El estudio, publicado en la revista especializada “The Journal of Maternal-Fetal and Neonatal Medicine”, incluye una muestra de 3.016 embarazadas, 168 (5,5%) con delgadez extrema, 2.597 (86,1%) con peso normal y 251 (8,3%) con obesidad grave o mórbida.
Los resultados revelan que las madres obesas tienen mayor riesgo de desarrollar hipertensión y diabetes mellitus, y de colonización por estreptococo grupo B. Además, en ellas es más frecuente que haya que inducir el parto o practicar cesárea, tanto electiva como de urgencia, y que el bebé sufra macrosomía fetal, acidosis al nacimiento y mortalidad perinatal.
Por otro lado, las mujeres con bajo peso son más propensas a padecer oligohidramnios (disminución en la cantidad de líquido amniótico) y a parir recién nacidos de bajo peso. La incidencia de parto prematuro o retrasos en el parto no fue significativamente diferente en relación con el peso de la madre.
“Las madres con obesidad severa o mórbida presentan un riesgo mayor de resultados adversos y mortalidad perinatal, por lo que deberían recibir consejos sobre cómo reducir peso y reconocer los signos de alerta temprana de posibles complicaciones”, subrayan los investigadores. “Sin embargo, tanto este grupo como el de las mujeres con bajo peso deben ser considerados como de ‘alto riesgo’”.
El nuevo estudio muestra que los recién nacidos de mujeres con obesidad mórbida o severa son más gordos. Además, el riesgo de macrosomía fetal es 2,3 veces mayor en este grupo en comparación con las mujeres de peso normal.
Para los autores, “estos resultados justifican la necesidad de asesoramiento antes del embarazo y podrían ser un argumento convincente para la modificación del peso”. “El estudio demuestra el mayor riesgo de embarcarse en un embarazo en situación de obesidad severa o mórbida y también de bajo peso”, concluyen.
Miércoles 18 de Abril de 2012 - 16:17 hs
La obesidad y la delgadez extrema provocan embarazos de riesgo
Un nuevo estudio sobre más de 3.000 gestantes lo confirma y, además, revela que el bajo peso de la madre también se relaciona con complicaciones específicas.