A veces, el desorden no es solo un tema estético. Ciertos objetos que se acumulan en una casa pueden generar polvo, humedad o incluso estrés visual, impactando en tu bienestar sin que lo notes. Acá, cinco cosas que deberías revisar y renovar:
Productos de limpieza vencidos
Con el tiempo pierden efectividad y pueden liberar compuestos irritantes. Revisá etiquetas y descartá lo que ya no sirve.
Cajas que no abrís hace años
Todo lo que se guarda “por las dudas” acumula polvo. Si no lo usaste en el último año, probablemente no lo necesitás.
Esponjas y trapos viejos
Pueden alojar bacterias. Es importante renovarlos seguido y desinfectarlos entre usos.
Maquillaje vencido
Usarlo después de la fecha puede causar irritaciones o infecciones. Fijate bien en los vencimientos.
Papeles y revistas acumuladas
Suelen atraer polvo y moho. Reciclá lo que no usás y digitalizá lo importante.