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La tasa de desempleo bajó a 8,2% en Estados Unidos en marzo, pese a una neta desaceleración de las contrataciones en el país, según cifras oficiales publicadas hoy.

En datos corregidos por variaciones estacionales, la primera economía mundial creó 120.000 puestos netos, según el departamento de Trabajo, muchos menos que lo estimado por los analistas, que esperaban 200.000 y una estabilidad del desempleo en 8,3%.

El nivel de contrataciones había sido más alto durante los dos primeros meses del año, permitiendo la creación de 275.000 empleos netos en enero y 240.000 en febrero.

Los economistas temen que esas cifras hayan sido infladas por un tiempo desacostumbradamente clemente, que alentó un incremento de la actividad que fue compensado con una desaceleración en marzo.

El desempleo puede evolucionar en sentido contrario a la creación de empleos: su tasa está determinada por sondeos en los hogares, mientras que la creación de empleo es calculada a partir de sondeos a las empresas, siendo sensible a las variaciones de la población activa (que aumentó menos en marzo que en enero o febrero) y es calculada en décimas de punto porcentual, con sus efectos de redondeo.

Desde el verano boreal, la tendencia de la tasa de desempleo es netamente a la baja, luego de alcanzar todavía 9,1% en agosto.

Esta tendencia también es clara para otra medida del mercado laboral, la tasa de desempleo y de subempleo (trabajadores a tiempo parcial contra su voluntad, quienes abandonaron la búsqueda de un puesto), que cayó a 14,5% en marzo contra 14,9% en febrero. Se trata de la tasa más baja desde enero de 2009.