Esta mañana, a las 10.15, falleció en el nuevo hospital Iturraspe de la ciudad de Santa Fe, Juan Antonio Barrios de 30 años, quien fuera emboscado y baleado en la tarde del sábado en inmediaciones de la esquina que forman las calles Piedrabuena y Larrechea por un motociclista con el que antes mantuvo una fuerte discusión verbal.
Barrios fue socorrido por vecinos, policías de Cuerpos y Orden Público y por un médico del SIES 107, que lo trasladaron y operaron en el nosocomio público quedando internado en la unidad de terapia intensiva en estado gravísimo.
Tirado en la calle
El sábado, después de las 21.30, los operadores de la central de emergencias 911 recibieron numerosos llamados telefónicos de vecinos que viven en inmediaciones de la esquina de Piedrabuena y Larrechea en el barrio Loyola Sur, pidiendo presencia policial y de una ambulancia por la existencia de un hombre baleado y tirado en la calle.
Minutos después oficiales y suboficiales del Cuerpo Guardia de Infantería y de la Subcomisaría 12° preservaron el lugar hasta la llegada de un médico en una ambulancia del SIES 107. El profesional compensó al hombre baleado entre la axila izquierda y el tórax, y posteriormente fue trasladado con sirenas y con balizas encendidas hasta el nuevo hospital Iturraspe.
El hombre herido, Juan Antonio Barrios de 30 años, fue recibido por los médicos de la Emergentología en el shockroom para pacientes en estado crítico y decidieron operarlo de urgencia en el quirófano central por la gravedad de su estado. Luego, cuando concluyó la intervención fue trasladado a la unidad de terapia intensiva, donde falleció a las 10.15 de este domingo.
Investigación
Los policías de Cuerpos y Orden Público que actuaron el sábado a la noche en el lugar y comenzaron con la investigación del caso supieron por vecinos de la populosa del noroeste capitalino que la víctima y el atacante que estaba subido en una motocicleta mantuvieron una áspera discusión verbal y después el motociclista sacó un arma de fuego, le disparó a una muy corta distancia y escapó hacía el oeste a toda velocidad.
Policías capitalinos de Orden Público y de Cuerpos buscaron saber si algún vecino posee cámaras de videovigilancia en su propiedad para obtener las imágenes y poder desentrañar la identidad del atacante. También hablaron con testigos circunstanciales del ataque criminal que pudieran aportar información vital sobre el atacante y obtener datos sobre su complexión física y vestimenta como también la descripción del motovehículo. Realizaron patrullajes intensivos en todo el sector aunque no hubo detenidos relacionado con el cruento suceso.