En Unión hay incertidumbre respecto a la fecha de la nueva Asamblea para tratar de aprobar la Memoria y Balance, que en su momento no tuvo el visto bueno dentro de un clima hostil y de tensión. Si bien es cierto que las aguas se calmaron, todavía están inquietas ante las diferencias entre las partes que todavía no se pulen.
Lógico, esto complica un poco el escenario sabiendo que es algo a resolver positivamente cuanto antes para evitar sanciones y así poder avanzar con otros temas deportivos. Todo tiene que ver con todo y por eso, la actual conducción busca los caminos más adecuados.
La oposición está abierta al diálogo, pero desde el oficialismo son un poco reacios aún, por lo que hubo un cónclave para acercar las partes. Esto no quieta que se pueda dar en la inmediatez. Mientras tanto, la idea que emerge sería que la Asamblea se haga después del 5 de diciembre, justo posterior a cuando el plantel retome las tareas.
No hay precisión todavía, pero es lo que se viene manejando dentro de un hermetismo marcado. Mientras más se demore, más complicaciones habrá.