El accidente que protagonizó el presidente de Colón, José Vignatti, generó un fuerte sacudón, pero a medida que pasaron las horas la tranquilidad y la calma volvió, ya que estaba bien de salud. Incluso llegó al Sanatorio Santa Fe llevado por su hijo para un chequeo médico.
Se conoció que sentía dolores en el pecho, producto de la fisura de dos costillas, pero nada grave. Por eso, por la tarde-noche recibió el alta médica y volvió a su casa. Los airbags se activaron a tiempo para que saldo no sea peor. Un nuevo gran susto, como el choque que sufrió en 2020.
Por lo pronto, siempre con los cuidados necesarios, iba a retomar paulatinamente los temas personales de su trabajo y también los institucionales, con muchas cosas por resolver.
Vale recordar que en abril pasado debió ser internado "por un cuadro neurológico", que no pasó a mayores. Un año con varios acontecimientos, de los buenos y también de los malos, que le toca afrontar al presidente sabalero.