El gobierno anunció este martes la suspensión de clases presenciales en los departamentos Rosario y La Capital, que entraron en alarma sanitaria este lunes; y tanto Amsafe como Sadop salieron a respaldar la decisión de la Provincia.
En diálogo con el móvil de Litus y LT10, Rodrigo Alonso recordó que el gremio docente venía planteando la necesidad de la medida y aclaró que la discusión actual “no es pedagógica, es sanitaria”. Más adelante explicó: “no es hacia adentro de la escuela, sino que la situación epidemiológica de la sociedad repercute en cada establecimiento educativo”.
“Coincidimos en el objetivo (de las autoridades), que es disminuir la circulación”, sostuvo el secretario general de Amsafe La Capital, y manifestó su deseo de que “esta suspensión traiga como resultado un alivio a la situación epidemiológica en toda la región”.
Por otra parte, Alonso aseguró que no están cuestionando la eficiencia de los protocolos que se aplican en las escuelas y que los docentes sostienen la presencialidad como está actualmente planteada, “que es una presencialidad cuidada y segura”. Sin embargo, argumentó que esa presencialidad “necesita de condiciones, y la primera condición es la sanitaria”. “Acá no va a haber derecho a la educación si no hay en primer lugar derecho a la salud”, sentenció.
Finalmente, remarcó que las suspensiones debe tener dos características: “ser temporales”, y que esa temporalidad esté ligada a las recomendaciones de los especialistas “para disminuir los casos y oxigenar a los sistemas de salud”; y “ser focalizadas en aquellos lugares (localidades, departamentos) donde la situación sanitaria sea sumamente preocupante, como el departamento La Capital”.
Más departamentos
En la misma línea que sus pares de Amsafe se expresó por LT10 el secretario general de Sadop Santa Fe, Pedro Bayúgar, quien además apostó a que la decisión sea extendida a otros departamentos, tales como General Obligado y Castellanos.
Asimismo, el sindicalista evaluó que los focos de contagio no se dan en las escuelas, "pero sí a raíz de la presencialidad, que genera una innumerable cantidad de contagios, no solo de alumnos sino de gente cualquiera".