Las fiestas clandestinas son una constante en lo que va de la pandemia y se han incrementado con la llegada del calor. Además, de la ciudad, se trasladaron a los distritos costeros donde hay espacios abiertos y piletas.
Incluso, el último fin de semana, desde la Municipalidad de Rincón contabilizaron 10 fiestas ilegales por festejos navideños. En este marco, se trabaja en medidas para controlar este tipo de eventos.
José Amado, secretario de Gobierno y Políticas Territoriales de la Municipalidad de San José del Rincón explicó que “hay decretos municipales que establecen multas y están tipificados los valores”. Además, tienen ordenanzas que regulan el ruido molesto.
Sin embargo, ante la espera de que se triplique la población en la zona, comenzarán a incrementar los controles, “articulado a nivel metropolitano con la ciudad de Santa Fe” en materia de tránsito, y reforzar el de las propiedades privadas y los espacios públicos junto al Ministerio de Seguridad.
Además, pretenden reforzar el área de control municipal, fomentando el uso del número de teléfono del monitoreo municipal, para que los inspectores puedan notificar irregularidades.
Por otro lado, Amado informa que ante irregularidades como las fiestas clandestinas, existe “una ordenanza de Rincón que dice que es responsable tanto el inquilino como el propietario. Estamos haciendo un trabajo previo con todos los titulares que quieran alquilar. También trabajando en algo a largo plazo que va a ser que aquellas casas quintas de alquiler, lo que es una actividad comercial, puedan regularizar otras cuestiones ante cualquier problema o situación anómala que pueda surgir en la casa”.
Las “fiestas clandestinas son un tema preocupante”, y por ese motivo se van a fortalecer los controles el 31 de diciembre.
Por último, se busca llegar a la “figura de corresponsabilidad entre el inquilino y el propietario”.