Las recientes críticas del ex presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, sobre la continuidad de la cuarentena en Argentina sumaron apoyos desde algunos sectores de la oposición que comienzan a advertir sobre los peligros institucionales de extender esta situación en el tiempo.
Una de ellas es la docente en Ciencias Políticas y miembro del Parlasur, Lilia Puig, quien planteó cuestionamientos sobre las medidas que lleva adelante el gobierno nacional y la pasividad de los gobiernos locales.
“Estamos en un proceso de continuación donde se están vulnerando las libertades individuales de comerciar, de trabajar; hay una violación flagrante de las libertades y derechos individuales en nombre de una emergencia que ni siquiera tiene un rango de emergencia constitucional”, explicó la dirigente radical en diálogo con LT10.
Para Puig, la cuarentena y su prolongación “se justifica pero por un tiempo”, el necesario para poner en condiciones todo el sistema sanitario para hacer frente a la pandemia de coronavirus en el país.
“Tampoco es aceptable como gobernadores e intendentes bajan la cabeza y aceptan este tipo de situación. Esta es una política aceptada bajo la base del miedo”, cuestionó.
Peligroso
Puig advirtió que “en Argentina resulta peligroso lo que está pasando” porque se desprecia el funcionamiento del Congreso y los concejos municipales y apuntó: “Acá la política pública ha desaparecido y ha sido reemplazada por una política coactiva”.
En la ciudad
También puso énfasis en lo que sucede en la ciudad de Santa Fe, que ya lleva casi 50 días sin casos de coronavirus pero mantiene la fase 4 de cuarentena y planteó la necesidad de “aprender a convivir con el virus”. Para ello –dijo- “el Estado tiene que ponerse a trabajar en los protocolos necesarios” para afrontar esta nueva realidad.
“Corrientes ya tiene funcionando sus bares y gimnasios porque tienen protocolo. El Estado no está trabajando como debiera”, completó.