Una desgracia con suerte sufrió Rocío Marengo en el ciclo Viva la pipol, de la televisión chilena. La argentina es una de las conductoras del programa del mediodía de Chilevisión y tropezó con un escalón de la escenografía al intentar auxiliar a un niño que estaba a punto de caerse al piso.
El pequeño es Bastián Pinto, niño elegido como embajador de la Teletón 2019, que padece diplejia espástica, una parálisis del lado izquierdo de su cuerpo que hace que tenga que usar bastones, y que había sido sorprendido en el programa con su grupo musical favorito.
El niño trastabilló y la conductora quiso agarrarlo para evitar su caída, sin suerte, haciendo que ella terminara en el piso junto a él. Unas horas después, Rocío llevó tranquilidad desde Instagram: “¡Quiero agradecerles a todos por la preocupación! ¡Les quiero contar que gracias a Dios fue sólo un susto! Estoy dolorida, pero bien, y lo más importante es que Bastián es un genio lleno de energía y está perfecto”, escribió.