Con su nueva participación en la pista del "Súper Bailando", Karina La Princesita vuelve a ser el foco de los medios. La cantante tropical explicó que si bien está pasando uno de sus mejores momentos su vida no fue siempre "color de rosas".
Y continuó: "Intuyo que parte de ser tan tímida se debe a eso. Crecí con mucha vergüenza. Compañeros míos de colegio fueron testigos de algunas situaciones, quizás entraba mi papá como loco a decirnos cosas graves o muchas veces mi mamá después de ser golpeada, entraba toda ensangrentada a buscarnos al colegio. Eso me provocaba mucha vergüenza".
A su vez, La Princesita confesó que otra cosa que le afectaba era que nunca pudo tener una casa. "Mi mamá trabajaba todo el día y con lo que ganaba, solo le alcanzaba para alquilar una piecita chiquita, donde vivíamos con mi mamá y mi hermano. Ahí adentro estaban las camas, una cocina chiquitita y el baño. Eso me daba vergüenza, siempre ocultaba dónde vivía y decía que mi casa era la que estaba al lado", manifestó.
Por otra parte, la mediática volvió a vivir un episodio de violencia en la celebración de Año Nuevo. Su hermano agredió a su madre y a ella, motivo por el cual lo filmó y compartió en las redes, aunque luego se arrepintió y lo borro. Al respecto advirtió: "Está todo bien. Entre familia es normal que haya problemas, aunque no justifico nunca la violencia. Hay que aprender a aceptar al otro, ayudarse".
"Todavía igual no pude tener una charla con él a solas y aclarar las cosas. Lo vi en el velatorio cuando falleció mi abuela y él hacía chistes sobre lo del verano pero lo importante es que reconoció su error", concluyó.