Las sospechas de corrupción siguen sumando nombres, y esta vez el apuntado es el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol, Marco Polo del Nero, quien fue suspendido por 90 días por la Comisión de Ética de la FIFA.
La casa madre del fútbol mundial lo acusa de haber recibido comisiones valoradas en 6,5 millones de euros para beneficiar a las empresas de marketing deportivo en contratos relacionados con tres campeonatos: la Copa América, Copa Libertadores y Copa de Brasil. Esta prohibición podría extenderse por 45 días más, pero por lo pronto Marco Polo del Nero será investigado.