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Un nuevo femicidio se registró hoy en Villa de María de Río Seco. Un hombre de 41 años mató a su novia, de 26, a puñaladas y después se suicidó. A ella le dio 16 puñaladas en diferentes partes del cuerpo, según el parte policial.

La Policía encontró el cadáver de Cinthia Quinteros durante la madrugada, a un costado del camino rural que va al Primer Paso, a unos cuatro kilómetros al oeste de Villa de María. El comisario Jorge Márquez confirmó a LA NACION que, horas después, hallaron el cuerpo de Mario Campos, quien se pegó un escopetazo.

El hombre estaba en una casa en la zona rural, con el arma larga debajo del cuerpo y un teléfono celular. En el fondo de pantalla de ese aparato había una imagen de la víctima, indicó Márquez.

Según la Policía Quinteros y Campos eran novios; no se registran denuncias por malos tratos ni amenazas. No convivían. Todavía buscan el arma con la que el hombre acuchilló a la mujer.

Esta semana, en Villa Dolores, un policía retirado baleó a su mujer -quien alcanzó a escapar y sobrevivió- y después él se suicidó. En ese caso sí había antecedentes de denuncias de la esposa por actos de violencia.

Hoy, en otro caso resonante, el de Paola Acosta quien fue asesinada por su ex pareja y tirada con su beba que sobrevivió 80 horas en una alcantarilla, el tribunal que condenó a perpetua al hombre explicó que no caratuló el hecho como femicidio porque era una relación "virtual, con pocos encuentros y no hubo sometimiento a la víctima".

De todos modos la pena es la máxima que se puede aplicar en estos casos. La familia de Paola no está conforme y apelará la medida; reclama que se instrumente la figura de femicidio.