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Newell´s y Godoy Cruz regalaron este lunes un entretenido encuentro en el Coloso Marcelo Bielsa. Sin embargo, el 1-1 final dejó más incómodo al conjunto rosarino, que ya lleva cinco presentaciones sin alegrías, que al mendocino, que presentó nueve cambios pensando en la Copa Sudamericana.

Primero fue el equipo de Javier Torrente el que se plantó mejor en el campo de juego y generó peligro gracias a los inquietos Mauricio Sperdutti y Víctor Aquino, pero después la visita se hizo fuerte en la salida del medio gracias al interesante Armando Cooper y arriba con Alvaro Navarro, y la cosa se emparejó.

Primero avisó Víctor Figueroa pero apareció Nelson Ibáñez, y en ese pasaje favorable el local Aquino sufrió en su contra un penal que no fue cobrado. Pero después se despertó el Tomba y empezó a gravitar: Cooper e Israel Damonte, de buena factura, exigieron a Sebastián Peratta, y luego le anularon un gol a Cooper en una jugada que generó discusiones.

Hasta que, a los 36 minutos, llegó la emoción. Lucas Bernardi apareció por izquierda y habilitó a Aquino, quien empujó el balón a la red por el segundo palo. Y la Lepra empezó a ilusionarse con cortar su mala racha.

Sin embargo, la decisión de los de Jorge Da Silva en el inicio del complemento bastó para emparejar la historia. El ingreso de Facundo Castillón mejoró su semblante de ataque, y Damonte no tardó en darle trabajo a Peratta. Hasta que a los 14, una pelota aérea generó confusión entre Hernán Pellerano y Peratta y Castillón aprovechó para capturar el balón y marcar el empate.

El gol sirvió entonces para abrir la cancha y generar un vibrante desarrollo de ida y vuelta. Newell´s quiso recuperar la ventaja y Godoy Cruz ir por más. En los rojinegros pesaron además los ingresos de Néstor Camacho y Carmelo Valencia. Alvaro Navarro desperdició su chance por falta de puntería, Aquino quedó solo frente al arco y entre Ibáñez y el palo le ahogaron el grito, Castillón asustó a Peratta y el ingresado Pablo Pérez y otra vez Aquino se encontraron con Ibáñez.

En el desenlace, y para los ojos acostumbrados a presenciar igualdades chatas, el empate tuvo sabor a poco para ambos protagonistas. Porque buscaron el premio hasta el final y sólo se llevaron un punto. Una lástima, pero indiscutiblemente justo.