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El jefe del Ejército, teniente general César Milani , admitió que es "un peso muy grande" las acusaciones en su contra por su presunta participación en la represión ilegal durante la última dictadura militar. En una entrevista radial, Milani insistió con que es "inocente" y denunció la existencia de "testigos falsos" y "cosas muy jodidas" en la causa que investiga torturas agravadas contra Ramón Alfredo Olivera y su padre, Pedro.

"Como dije en varias oportunidades, tarde o temprano, la Justicia va a demostrar totalmente mi inocencia", manifestó ayer Milani, en diálogo con la radio de las Madres de Plaza de Mayo.

Días atrás, el juez federal de La Rioja, Daniel Herrera Piedrabuena, hizo lugar al pedido que le realizó el fiscal general Horacio Salman y declaró la nulidad de la causa contra Milani por las supuestas torturas a Olivera y su padre. Así, una de las investigaciones que tiene a Milani como principal responsable -las otras dos, por la desaparición del soldado Alberto Ledo y el presunto enriquecimiento ilícito, avanzan lentamente- volvió a foja cero, pero no deslindó, aún, de responsabilidades a Milani.

Milani, el ministro de Defensa, Agustín Rossi , el diputado nacional y jefe de La Cámpora, Andrés Larroque, y la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini , encabezaron ayer un acto en un barrio carenciado de la localidad bonaerense de Florencio Varela, donde inauguraron obras públicas en las participan integrantes de las Fuerzas Armadas. "Soy absolutamente inocente. Es un peso muy grande. Hay testigos falsos y cosas muy jodidas en esta investigación", apuntó.

Y agregó: "Nunca jamás nadie me mencionó, ni siquiera estaba querellado y de golpe han aparecido testigos falsos y llegaron decir que era amigo de (el fallecido ex gobernador tucumano Antonio) Bussi o cuestiones de esa naturaleza. Tenga la tranquilidad que soy inocente de todos los cargos que se me imputan".