Consultado por un pálpito para el duelo que animarán alemanes y argentinos en Río de Janeiro el próximo domingo desde las 16, el delantero no tuvo inconvenientes para decidirse por un ganador. "No tengo dudas que será campeón Alemania... Argentina no tiene ninguna chance", resaltó el hombre del Bayern Münich, tras un desempeño propio bastante distanciado de lo deseado en la previa.
Enfocado en su rol de referente del combinado de Louis Van Gaal tanto dentro como fuera de la cancha, el punta analizó la salida de la Copa del Mundo y manifestó que "hemos tenido alguna que otra oportunidad, pero poca cosa. En los penales tuvimos éxitos en Cuartos y ahora hubo mala suerte". ¿Elogios hacia el rival de turno? Jamás...
Por otro lado, Robben, que tiene 30 años y venía de perder la Final del Mundial anterior ante España, aseguró que "es decepcionante no llegar a esa instancia de nuevo. Es muy complicado dar una opinión del torneo porque ahora estoy muy decepcionado. Hemos estado cerca". Al menos, su reconocimiento estuvo vinculado hacia la labor de sus compañeros, dejando en claro que "estoy orgulloso de formar parte de este equipo".
"No es momento de hablar del futuro", cerró su diálogo con la prensa, pensando solamente en el choque del sábado ante Brasil por la medalla de bronca, todavía masticando bronca por no acceder nuevamente al partido más trascendental de todas las competiciones internacionales.