El fallo absolutorio del ex presidente Carlos Menem en la causa por tráfico de armas a Ecuador y Croacia puso nuevamente de relieve las críticas al sistema judicial: el paso inexorable del tiempo sin resolución de las causas más emblemáticas de corrupción. 23 años en el caso de la causa armas hizo quebrar el plazo razonable de investigación y la justicia hoy dice que Menem no es inocente, pero tampoco culpable. El tiempo que pasó conspiró contra el servicio de justicia y el actual senador seguirá en libertad.
En la causa del vaciamiento del ex Banco Provincial la situación es similar: se inició en 1990 y aún no hubo resolución en torno a las responsabilidades de aquellos funcionarios y directivos.
La justicia y la biología
De los 44 imputados varios ya están fallecidos.
Los tiempos de la justicia van, incluso, “en contra de las leyes de la biología”, dijo el abogado defensor de los imputados, Leandro Corti.
A 28 años de iniciado el proceso judicial en torno a uno de los casos más emblemáticos de corrupción en Santa Fe, la Corte Suprema de Justicia de la Nación debe resolver la cuestión de fondo: si se debe seguir investigando o si, en cambio, prescribió.
En diálogo con el programa El Cuarto Poder, Corti descartó que las demoras estén vinculadas con maniobras dilatorias de la defensa. “Estar sometido a proceso no es una situación agradable, máxime cuando se prolonga -como esta causa- 28 años”, explicó el letrado.