Este miércoles, la Cámara de Diputados santafesina comenzará a definir en una sesión extraordinaria si la provincia avanza con la Reforma Constitucional. En caso de darle media sanción a la iniciativa, luego el Senado provincial deberá analizarla.
El proyecto promovido por el gobernador Miguel Lifschitz fue enviado a la Legislatura el 16 de abril durante un acto se desarrolló en Casa de Gobierno y contó con la presencia de numerosos dirigentes políticos de distintos espacios.
En diálogo con El Cuarto Poder, el gobernador habló sobre la necesidad de que se "modernice" la carta magna provincial: "Nuestra constitución ha quedado obsoleta, antigua", remarcó. A su vez, sostuvo que el tratamiento del proyecto es una forma de incluir todos los avances "con consenso social".
Además, destacó que la reforma le daría "más calidad a la política: "Abriría el debate sobre temas muy importantes como el medioambiente, y el derecho a la igualdad de las mujeres, que no se refleja en absoluto en el texto constitucional".
A través de una entrevista personal realizada a más de 15.000 santafesinos, el gobierno provincial constató que "hay un 80% de personas que acuerdan con la necesidad de la reforma", aunque el gobernador subrayó que las modificaciones serían parciales, preservando los artículos sobre los que había consenso en mantener, y modificando algunas cuestiones e incorporando temas que no están previstos en la letra.
Sobre la reelección del gobernador, uno de los puntos más discutidos, el titular de la Casa Gris destacó no debe ser una excusa para no tratar la reforma: "todo el mundo está de acuerdo en que a futuro todos los gobernadores tengan dos períodos".
Finalmente, Lifschitz recalcó que si hay consenso mayoritario en avanzar con la reforma y que eso no sea viable para el actual gobernador, "es cuestión de poner una cláusula transitoria" que no permita esto. "No debiera ser eso una excusa para que no avanzara el proceso constitucional", cerró.