Parece que si no es sufriendo no vale. La Selección Argentina le hizo este martes honor al tema de Soledad Pastorutti poniendo ante Nigeria "alma, corazón y vida" para ganar 2-1 y así meterse de manera agónica en los octavos de final del Mundial de Rusia como segundo del Grupo D. Lejos estuvo de brillar y de ser convincente, pero se notó que hubo una mejoría y se tuvo mucha entrega para no rendirse.
Fue así como llegó el ansiado tanto de Marcos Rojo, con el que más de medio estadio en San Petersburgo explotó de júbilo. En la previa se habían hablado de un montón de cosas, algunas ciertas y otras de las que no hay certezas y por eso el desahogo de los jugadores en el final. Algunos llorando y otros estrechándose en un abrazo eterno.
Para algunos ahora contra Francia empieza el verdadero Mundial y ojalá este triunfo sea el punto de despegue para este grupo de jugadores y sobre todo para Lionel Messi, al que no le habían salido bien las cosas hasta acá. Para ello habrá que volver a hacerle el aguante al equipo de Jorge Sampaoli, dejando atrás las críticas.
Justamente el equipo Diez en Deportes está en Rusia haciendo una cobertura en todas sus facetas y de esta manera Guillermo Schmidt relataba por LT10 el final del encuentro. ¡Impresionante!
