Después de una serie de hechos de violencia e inseguridad que tuvieron como protagonistas a cuidacoches en la ciudad de Santa Fe, agentes municipales y efectivos de la policía comenzaron a trabajar en conjunto para despejar de “trapitos” las zonas de estacionamiento medido.
El problema no es nuevo, ni sencillo. De hecho, la difícil situación social hizo que durante los últimos tiempos se multiplicara en número de personas que cuidan coches a cambio de dinero.
Sin embargo, las ordenanzas vigentes prohíben este tipo de actividad en zonas de estacionamiento medido, donde los conductores ya deben pagar por dejar sus vehículos.
Esta mañana, comenzaron los operativos, que se realizan entre la policía y la Guardia de Seguridad de la municipalidad. En principio, fueron removidos los "trapitos" que están apostados en las cuadras del microcentro y barrio Constituyentes, dos zonas donde opera el estacionamiento medido, y donde por ordenanza está prohibido que los cuidacoches realicen estas actividades.
El autor del proyecto de esta norma es el concejal Sergio Basile, quien en diálogo con el móvil de LT10 remarcó que "en la zona de estacionamiento medido no debe coexistir la figura del cuidador de vehículos. Además, el compromiso del ministerio de Seguridad, en la última reunión que tuvimos, fue que van a intervenir ante cualquier requerimiento del municipio por hechos de violencia o delitos en que los ciudacoches estén involucrados, y hallan sido denunciados por los vecinos".
En el caso de hacer cumplir la normativa y retirar a los cuidacohes "también es necesario que actúe la secretaría de Control con la Guardia de Seguridad y todo el mecanismo que tengamos para poder brindarle seguridad a los vecinos de la ciudad".
La ordenanza, llegó para acotar la actividad en el macrocentro santafesino, y surgió luego de varios cruces entre municipio y provincia por una serie de delitos y hasta peleas que dieron entre los mismos "trapitos" o entre ellos y los vecinos.
El proyecto considera que a cada cuidador de vehículos se le asigne una calle, así como también darle prioridad en la actividad a personas con discapacidad y aquellos mayores de 40 años. También se planea darles una capacitación inicial sobre el ordenamiento del tránsito y convivencia, e identificarlos con chalecos donde figure el 0800 de la Municipalidad para poder hacer denuncias o reclamos, así como hacer explícito en el chaleco que la contribución es voluntaria.
Al respecto, Basile señaló que "lo que queremos es la regulación, el resgistro y el posterior acompañamiento en el trabajo formal", haciendo hincapié que el operativo encarado hoy es solamente una parte de la iniciativa.