El 26 de julio, el fuego tomó una vivienda de barrio Roma. En el interior se encontraba una mujer, Miriam Belenguer, con sus dos hijos. El incendio se propagó rápidamente por la casa y fueron los vecinos quienes los auxiliaron en principio, mientras llegaban los bomberos.
Primero salió de la casa la hija adolescente gracias a que los vecinos pudieron rerribar la puerta, pero Miriam y su hijo Alfonso no lograron bajar del primer piso.
El nene, que padece autismo, se había asustado y debieron esperar la llegada de los bomberos. Cuando fueron rescatados y derivados, la mamá al hospital Cullen, y el nene al de Niños, habían inhalado demasiado dióxido de carbono lo que afectó sus vías respiratorias superiores; encontrándose los dos en estado crítico.
La recuperación de ambos, según dice la propia Miriam en diálogo con el móvil de Litus y LT 10, fue "milagrosa". Ella ya fue dada de alta, y Alfonso se recupera favorablemente, y fuera de peligro, en el hospital de Niños.
"Quiero agradecer al bombero que sacó a Alfonso de mi casa. El no quería bajar por donde me bajaron a mí porque le daba miedo el vacío, tenía miedo", contó.
Aprovechó para agradecer a los vecinos que "fueron los primeros que nos socorrieron", y recordó que fue Alfonso quien le avisó que algo se estaba quemando en el living de su vivienda.
"Estaba jugando y me fue a llamar porque yo no me había dado cuenta, ni había sentido olor. Fue todo muy rápido, un momento de desesperación. No podía sacar a mi hijo, no sabía que mi hija ya había salido y no la encontraba. Te va ganando la desesperación y me daba cuenta que yo también estaba entrando en shock, además del humo que te empieza a atontar", relató, sobre el momento del incendio.
"Estoy muy agradecida por cómo lo están atendiendo en el hospital de Niños y por suerte, pronto vamos a estar juntos", dijo Miriam.
