Los espectadores se sorprendieron cuando antes de ver la función de la Orquesta Sinfónica Provincial en el Centro Cultural, los integrantes leyeron un petirorio compartiendo con el público dos reclamos que consideran fundamentales para su desempeño: seguridad y acústica.
Según detalló por LT10, Gabriela Peirano, miembro de la Orquesta, "las tarimas que utilizan no tienen tope, las sillas son viejas y se mueven, lo que provocó la caída de varios músicos. Hace mucho que venimos pidiendo mejoras en cuanto a nuestra seguridad y también en relación a la acústica".
Peirano aclaró que se encuentran en estado de Asamblea y que no tiene que ver con una cuestión salarial: "Estamos pidiendo condiciones de trabajo segura para nosotros pero también para el público. Los problemas de acústica también son muy importante porque estamos dando un potencial del 60% y la gente merece otra cosa".
En cuanto a esto último, la violonchelista remarcó que el Centro Cultura nunca fue una sala preparada para una orquesta sinfónica, "era una sala de Lotería por eso habíamos solicitado una cámara acústica que la tuvimos pero hubo que devolverla porque estaba mal hecha. Lo mismo pasó con las tarimas".
El petitorio
Estimado público, sentimos la necesidad de compartir con Ustedes algunos aspectos que están generando severas interferencias en el normal desarrollo de nuestra actividad. Desde el 28 de junio los integrantes de la Orquesta: músicos, administrativos, utileros, copistas y archivistas, estamos en estado de Asamblea Permanente. La causa de la misma es el hecho que desde hace años venimos pidiendo se solucionen una serie de necesidades básicas que son indispensables para llevar a cabo nuestro trabajo diario, dichas soluciones impactarían en nuestras presentaciones en público para poder así brindarles a ustedes lo mejor en cada uno de nuestros conciertos.
Las necesidades son numerosas, algunas de ellas son urgentes. Necesitamos de modo apremiante se resuelva la acústica del escenario, que se nos provea con tarimas que no sean un riesgo para los músicos que allí se ubican, ya que se han caído hasta la fecha cuatro de los profesores que integran el organismo. A esto debemos sumar la iluminación del escenario, cuya luz es insuficiente y está lejos de ser el tipo de luminaria que necesitamos para ver bien y sin esfuerzo las partituras. Estas son necesidades urgentes, y siempre se dice que lo urgente mata lo importante pues hay otras necesidades que incluyen por ejemplo el reemplazo de instrumentos que son propiedad de la orquesta y ya han cumplido su ciclo, por instrumentos nuevos que se adecúen a los ambiciosos programas que se abordan desde hace varios años.
La orquesta y su público son dos caras de la misma moneda, somos complementarios y nos necesitamos mutuamente. Por eso hoy antes de comenzar a disfrutar esta velada que seguramente será memorable, sentíamos el deber de compartirlo con ustedes y en la medida de lo posible les pedimos que nos acompañen y ayuden para que esto llegue a oídos de las autoridades, ya que en la medida que nuestras condiciones laborales mejoren, ustedes, nuestra caja de resonancia recibirán también lo mejor.
Como dijimos antes, lo urgente mata lo importante pues sabemos que todo esto se solucionaría inmediatamente cuando la Orquesta Provincial de la Provincia de Santa Fe tenga su sede propia. El sueño de tener nuestra casa, preparada para los requerimientos de los dos más altos elencos artísticos musicales con sede en la Capital de la Provincia: la Orquesta Sinfónica Provincial de Santa Fe y el Coro Polifónico Provincial. Y así dotar a la capital Provincial de una Sala Sinfónica de la cual aún carece. Creemos firmemente que las Utopías dejan de ser tales cuando las voluntades se suman en pos del bien mayor.
Gracias por escucharnos y ayudarnos a hacer esto posible. Que disfruten la velada.