Ese fue el argumento principal por el cual la Subsecretaría de Niñez decidió que el menor de tres años sea enviado a la localidad de San Carlos, lejos de la familia solidaria con la que vivió por casi dos años y que aún tiene la intención de adoptarlo.
En la jornada de ayer la pareja conformada por Cristina Morla y Sergio Gigliotti llevaron a Casa de Gobierno las 124 mil firmas recolectadas. Además, se dio a conocer un documento en el cual se rechaza la cautelar para retrotraer todo al día en que tuvieron que entregar a Kiki.
En comunicación con Al derecho y al revés, Sergio Gigliotti contó que esa medida ya fue apelada, y que el pedido de adopción de Kiki y su hermanito sigue en curso. “En octubre hicimos la presentación formal de la adopción de Kiki y el 1 de febrero la ampliación para adoptar también a su hermanito. Lo que mejor que les puede pasar es que se críen juntos” declaró Sergio.
Lo más llamativo es que actualmente los niños no se encuentran juntos. Si bien están en la misma ciudad, ambos se encuentran con familias solidarias diferentes. Por lo tanto, para Gigliotti “lo primero que dijeron fue mentira. Nosotros lo que sentimos es que se quiere romper un vínculo”.