A pesar de que Enrique Albera -el taxista santafesino que incorporó el pago con tarjetas de débito o crédito en su auto- demostró que la implementación de este sistema es posible y no resulta demasiado engorroso, dirigentes del sector continúan mostrando su escepticismo con respecto a este tema.
"Pensábamos que el intendente Corral nos iba a decir que la implementación del posnet sería obligatorio en todos los taxis, pero afortunadamente no fue así", advirtió Francisco Aiello, presidente de la Asociación de Taximetristas Unidos de Santa Fe, en una clara muestra de que llegaron a la reunión convocada en el Palacio Municipal esta mañana con la idea de oponerse a cualquier tipo de imposición.
Aiello insistió en que en el presente "la gente sigue utilizando dinero en efectivo, así que el riesgo de asaltos lo vamos a seguir corriendo". Por ese motivo, insistió en continuar trabajando en un tema que se discutió hace algunos meses, sobre la puesta en funcionamiento de un vehículo especialmente pensado para taxistas.
El año pasado, luego del asesinato de un taxista santafesino, el ministro de Seguridad provincial, Maximiliano Pullaro, se reunió con referentes del sector y acordaron iniciar negociaciones con el gobierno nacional para desarrollar en Santa Fe un prototipo de taxi seguro y destacó que el Estado "debe generar las condiciones de seguridad "para que los taxistas puedan trabajar tranquilos".
"Nos vamos conformes porque creíamos que iba a ser obligatorio el uso del posnet", remarcó Aiello. Pero Corral les dijo que la implementación del sistema debería ser progresiva.
En este sentido, el referente de los taxistas hizo hincapié en que "la gente se resiste por las particularidades que tiene este sistema, habrá que hacer cursos.... el posnet sería gratuito sólo por un año. Pero al teléfono tenemos que comprarlo nosotros y la línea telefónica también.
Por el momento, no se realizó ningún tipo de consulta general entre los casi 700 choferes y propietarios de taxis que recorren la ciudad de Santa Fe. De esta manera, Enrique Albera sigue siendo el único que recibe tarjetas. Y por lo visto, la implementación del sistema en su vehículo no representó para él ningún tipo de inconveniente.