Colón cumple su segundo día de pretemporada en las canchas de golf del Club Estudiantes de Paraná, donde por ahora Eduardo Domínguez no cuenta con caras nuevas para afrontar la triple competencia que tendrá en 2018.
Las jornadas se dividen en tres turnos y la gran noticia es que Facundo Silva, quien se perdió varios partidos de la primera parte del campeonato por lesión, ya trabaja a la par de sus compañeros, en lo que significa una gran noticia atendiendo a las variantes ofensivas que le brindó al DT cada vez que lo mandó a la cancha.
Hasta que José Vignatti no retorne de su viaje a Europa, donde estuvo en la sede de la FIFA en Zurich (Suiza) y ahora se trasladará hasta Alemania para finiquitar los detalles que restan en la transferencia de Lucas Alario al Bayer Leverkusen, no habrá grandes novedades en el mercado de pases.
Cristian Espinoza es una de las debilidades que tiene Domínguez, ya que fue compañero y lo dirigió en Huracán. El jugador está relegado en Boca y su salida podría ser propicia si se produce el retorno de Ricardo Centurión para jugar la Libertadores en el equipo que conduce Guillermo Barros Schellotto.
Otro de los nombres que viene sonando desde hace un buen tiempo es el de Lucas Albertengo, quien está en la consideración de Ariel Holan para jugar los tres torneos que tendrá por delante Independiente en 2018, con la Libertadores como principal objetivo. El rafaelino también es pretendido por Huracán y Estudiantes, que también disputará el máximo certamen continental.
A la par de estos rumores, las caras nuevas que tiene el plantel obedecen a dos pibes que fueron promovidos por Domínguez al plantel de Primera. Se trata de Juan Cruz Zurbriggen y Lautaro Saravia, quienes desde el inicio de la puesta a punto trabajan con el equipo.
Zurbriggen es categoría 2000 y nació en Estación Clucellas, donde dio sus primeros pasos en el fútbol en el club Libertad. Posteriormente jugó la Liga Rafaelina en Florida de Clucellas. En tanto, en 2014 pasó a Atlético de Rafaela y posteriormente se sumó a Colón (2016), donde viene de ser goleador de la Cuarta División.
Por su parte, Saravia es categoría 1998, y fue clave en 2017 cuando el Sabalero logró el título en la Liga Santafesina, convirtiendo dos goles en la victoria ante Cosmos en el partido decisivo.