Mauro Cejas dejó de ser formalmente jugador de Unión, luego de haber llegado para reforzar al equipo en enero de este año cuando Juan Pablo Pumpido era el entrenador. Luego, tuvo continuidad con Pablo Marini. El volante habló con Diez en La City por FM "X" (103.5) sobre su situación e hizo un repaso de su paso por el club.
En el inicio de la charla, expuso: "Ya soy ex jugador de Unión. Terminamos de firmar la desvinculación, por lo que no pertenezco más al club. Me voy con un poco de nostalgia y tristeza por cómo se dio toda la situación, ya que llegué con todas las ilusiones de poder hacer las cosas bien y no se dio de la manera en que se esperaba".
Luego, se refirió a los motivos que considera que le jugaron en contra para no haber encontrado su mejor forma en Unión, definió: "La adaptación, me pasaba que arrancaba muy bien y luego me caía desde lo físico. Sabía que me iba a costar, pero iba a ser un proceso que sabía que me iba a pasar. Ahora estaba muy bien para este torneo, pero las cosas no se dieron para que siga".
"Era como lo tenía planeado y como lo había hablando antes de arreglar. Si en el torneo pasado nos hubieran acompañado más los resultados estaríamos hablando de otra cosa, pero nos fue mal y el único refuerzo que llegó fui yo, por lo que hay que aceptar las críticas", agregó más adelante.
También se refirió a su relación con el plantel, manifestó: "Terminé bien, hay un grupo espectacular, con muchos pibes. Desde que llegué me recibieron muy bien, uno con la experiencia le podía aportar algo a los pibes, pero es una lástima no poder seguir porque tenía muchas ganas de hacerlo".
Sobre si hubo un diálogo con Leo Madelón, contó: "Antes que termine el torneo pasado me di cuenta que no iba a tener más lugar, cuando no fui citado en Copa Argentina y con Boca. Después vino Madelón y seguramente cuando llega un técnico nuevo decide cómo armar el plantel. Me dijo en la cara que no me iba a tener en cuenta, algo que valoro mucho. Me dejó entrenar con el plantel y uno lo agradece mucho".
En cuanto a lo que viene en su futuro futbolístico, analizó: "Pienso que puedo seguir jugando al fútbol, que lo puedo hacer en el fútbol argentino, es una espinita que me quiero sacar. Ahora tendré que esperar hasta diciembre para ver qué puede salir. Estaba haciendo trabajos diferenciados, los disfrutaba ya que no me servía hacerlo molesto".
"Uno aprende de las situaciones en las que pasa, me encontré con otra realidad del fútbol argentino. En Unión hice muy buenas amistades, me queda la satisfacción de haber ayudado a algún compañero en el peor momento del equipo. La gente en un momento estuvo enojada conmigo, me hubiese gustado tener una revancha para cambiar insultos por aplausos.