Según el informe anual de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) solamente un 19 % de los argentinos de entre 25 y 34 años tiene sus estudios universitarios completos, manteniéndose por debajo de la proporción de algunos países latinoamericanos como Chile (30 %), Colombia (27 %), Costa Rica (28 %) y México (21%).
De continuar estos patrones actuales, alrededor del 56 % de los argentinos realizarán un programa universitario de corta duración en algún momento de su vida, el porcentaje más alto registrado en el mundo, muy por encima del 16 % de media del organismo. Asimismo, se espera que un 53 % termine una carrera en algún momento.
Las ciencias duras siguen siendo en el país las carreras que menos graduados aportan: solo un 14% estudiaron carreras de ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas, lo que convierte a Argentina en el segundo país con el porcentaje más reducido de graduados en estas disciplinas, sólo por detrás de Costa Rica.
Los gastos universitarios argentinos entre los más bajos de Sudamérica
Por otro lado, el estudio revela que el gasto anual por estudiante en todos los niveles educativos es bajo en comparación con la mayoría de los países contemplados: 4.240 dólares en 2014, frente a los 10.759 dólares de media, aunque está en línea con la región.
También hace hincapié en que el país dedica una gran parte de recursos nacionales a la formación, en concreto, un 5,6 % de su Producto Interior Bruto (PIB), frente a la media del 5,2 % de la OCDE.
En concreto, nuestro país destina un 4,4 % del gasto público a la primaria y un 6,1 % a la secundaria, nueve décimas y un punto y medio por encima del organismo, respectivamente. A la educación superior se le dedica el 3 %, en línea con el 3,1