Sucesos

Martes 12 de Septiembre de 2017 - 09:57 hs

¿Qué son las mulas y cómo actúan?

El traslado de droga en el cuerpo conlleva un enorme riesgo médico. Cómo cambiaron estas modalidades a lo largo del tiempo.

Actualizado: Viernes 15 de Septiembre de 2017 - 14:56 hs

Así se ven las cápsulas de cocaína a través de placas.

El traslado de droga es parte de un negocio tan multimillonario que la vida de las personas, al lado de eso, parece no valer nada. Eso es la vida de una “mula”, como se denomina a las personas que usan su propio cuerpo como envase para trasladar droga, poniendo en enorme riesgo su vida.

En el estómago, en la vagina, de manera sólida o líquida, las "mulas" ocultan dentro de sus organismos pequeñas -y no tan pequeñas- cantidades de estupefacientes. Cuando no logran pasar los controles, son los médicos los encargados de llevar a cabo el proceso de evacuación de la droga.

Las primeras mulas introducían por estómago, vagina o ano droga en estado sólido, que era detectada a través de la realización de placas.

La modalidad de tráfico fue cambiando y exigió, a su vez, nuevas prácticas médicas para detectar la droga y salvar la vida de estos pacientes en riesgo: las cápsulas líquidas no son detectadas por placas, sino que solamente se ven con la práctica de tomografías computadas.

Las cápsulas líquidas pueden ser más fáciles de ingerir, pero hay más posibilidades de que se perforen y esto puede ser letal para el paciente.

Por lo general las bolsas de droga se evacúan naturalmente, porque son de un tamaño y una forma ideal para la evacuación y están protegidas para tolerar los ácidos clorhídricos que contribuyen a nuestra disolución alimentaria.

Algunos traficantes utilizan preservativos y otras bolsas más específicas para el transporte del material algo más seguras que los condones. Normalmente se reparten a lo largo del intestino, estómago, vagina o ano.

A partir del 2011 las técnicas de tráfico cambiaron y se empezaron a utilizar las cápsulas líquidas, que no son detectadas por las placas. Para los médicos fue entonces mucho más difícil detectar la substancia que se ha ingerido. 

Fuente: La Nación - varias