Esta mañana, un joven de 23 años oriundo de Paraná que realiza sus prácticas profesionales de Kinesiología en el Hospital Vera Candioti recibió una descarga eléctrica. Las circunstancias del hecho se investigan. Las primeras versiones indican que dicha descarga podría haber procedido de un hidromasaje o de una pluma elevadora (que se usa para los pacientes con discapacidad motriz).
La víctima fue trasladada al Cullen, donde ingresó con un paro por electrocución, según detalló el director de ese nosocomio, Juan Pablo Poletti.
Tras ello, el joven sufrió un nuevo paro cardíaco y fue resucitado en el Shock Room. En este momento está en la Unidad Coronaria en estado delicado, con asistencia respiratoria, en coma farmacológico y con terapia de reanimación intensiva.