LT10

Viernes 31 de Octubre de 2014 - 17:54 hs

Escuela 2030: contenidos online, profesores como \\"guías\\" y un idioma global de enseñanza

Esas son algunas de las conclusiones de la encuesta realizada por World Innovation Summit for Education a más de 600 especialistas. Infografía: las 9 claves de la escuela del futuro.

Actualizado: Lunes 14 de Marzo de 2016 - 00:26 hs

No falta tanto para el año 2030. Son dieciseis años para proyectar una escuela y una manera de aprender y enseñar hacia el futuro que contemple e incorpore las transformaciones socio-históricas que imprime este frenético siglo XXI.

Seguramente ese espacio aúlico, casi sagrado, con el profesor al frente de un grupo de alumnos sentados mirando hacia él, en el 2030, ya no será el mismo. La clave del debate será cómo y en qué eslabones del proceso educativo se instalará y ocurrirá esa reinvención.

Teniendo en cuenta uno de los aspectos más interesantes de esta encuesta 2014 que encaró el World Innovation Summit for Education (WISE), el futuro de la escuela y la educación se desprende sobre las bases de lo que hoy funciona bien. Y no necesita reinventarse por completo.

Ahora, ¿cuál será la justa medida entre la inyección renovadora que aportarán las nuevas tecnologías y la capacidad de discernimiento y profundización de los contenidos online o de la Big Data, esa acumulación casi paralizante de sobreinformación que inhibe muchas veces la posibilidad de pensar?

¿Cuál será el rol de los profesores? ¿Existirá un idioma global en la educación del siglo XXI? ¿Deberían las escuelas priorizar las habilidades personales por sobre el conocimiento académico? ¿Alcanzará con el diploma para la certificación profesional?

Estas son algunas de las preguntas medulares que se propuso abordar la iniciativa WISE -fundada en 2009 por la Fundación Qatar- por sus siglas en inglés, World Innovation Summit for Education , cuya cumbre mundial se realizará en Doha, Qatar, entre el 4 y 6 de noviembre próximo.

La encuesta "Cómo será la escuela en el año 2030" se realizó entre 645 expertos globales entre el 3 y el 30 de junio de 2014. Infobae accedió en forma exclusiva al informe de las conclusiones de la encuesta WISE y aquí las presenta.

Inside sobre el futuro
El gran valor agregado de la encuesta de WISE lo completan los cinco expertos destacados que interpretaron cada una de las conclusiones y los datos duros de la investigación. Ellos son, el lingüista y filósofo norteamericano Noam Chomsky; el profesor indio, Sugata Mitra, de la Universidad de Newcastle, Inglaterra; John Mahaffie un estudioso del futuro de la educación y cofundador de la Asociación de Profesionales del Futuro; Yasar Jarrar, uno de los líderes de los Emiratos Árabes más brillantes del WEF (World Economic Forum ) y Julia Gillard, ex primer ministro de Australia y también ex ministra de Educación.

Conclusión 1: De las fuentes calificadas al valor del "click"

Este punto estuvo dividido entre los expertos que respondieron: aquí se plantea uno de los desafíos pendientes de la accesibilidad a los contenidos online. Se trata del valor y la jerarquización de las fuentes del saber. Casi la mitad de los encuestados (el 43%) refiere al contenido online provisto por personas especializadas y/o instituciones privadas como la fuente más importante de conocimiento.

Sobre los contenidos online el experto Noam Chomsky, considerado el padre de la lingüística moderna, es categórico: "Comparto el punto de vista del 43 por ciento de los expertos de la encuesta de que el contenido online es una herramienta pedagógica, útil para aliviar los problemas de acceso, pero no es suficiente como modelo para la educación".

Chomsky cita la experiencia en el Massachusetts Institute of Technology (MIT) donde trabaja actualmente para rescatar el aporte al conocimiento del aquí y ahora. "En el MIT mientras se escucha una conferencia, se completa el proceso educativo con lo que aportan los colegas y las reflexiones en vivo de otros profesores. Por eso creo que es improbable que pueda sobrevivir la educación online, porque será una experiencia más empobrecida. Aunque claramente es una ventaja para aquellos que no podían compartir la experiencia in situ".

Sobre este punto, el 13% de los encuestados priorizó como fuentes autorizadas a los factores externos del alumno: ambiente social y personal que lo rodea; mientras que el 8% cita el lugar de trabajo, y el 3 por ciento cita a las instituciones culturales como las principales fuentes de conocimiento en el futuro.

Conclusión 2: La innovación en educación será un atributo muy valorado
Este punto tuvo consenso categórico entre los que respondieron la encuesta. El 93% de los encuestados se mostró a favor de que las escuelas implementen métodos innovadores basados ​​en nuevos enfoques de enseñanza y procesos creativos. Sólo el 7% considera que las escuelas volverán a los valores fundamentales y las tradiciones.

¿Por qué resulta clave para los expertos la noción de innovación? Porque se extiende más allá de las nuevas herramientas de enseñanza, abarca a las pedagogías innovadoras y la redefinición de los roles tradicionales en todos los niveles de la educación.

Consultado por los resultados de la encuesta de WISE, el especialista argentino en educación Juan María Segura, autor del libro Yo qué sé. La educación argentina en la encrucijada (Editorial Dunken), precisa a Infobae: "Innovar es un mandato y no una opción. Hoy, con la evidencia contundente del abandono escolar en la región (el 45 por ciento en promedio abandona sus estudios entre los 14 y 16 años) y los malos aprendizajes; es tiempo de canalizar la energía y el tiempo hacia formatos más interactivos, lúdicos y sociales, las instituciones no deberían ver en la innovación una opción sino una obligación impostergable".

John Mahaffie es un gran inspirador para los expertos en educación por sus ideas y entusiasmo creativo y agrega: "La gente suele pensar que para innovar hay que gastar dinero y dar a cada estudiante una tablet o notebook. Hay enfoques alrededor del uso de la tecnología mucho más interesantes. Por ejemplo, cambiar la rigidez del sistema actual de clasificar a los niños por su edad sería una innovación social y pedagógica".

Conclusión 3: el conocimiento académico se complementará con otros

El 75% de los encuestados piensa que las habilidades personales serán fundamentales y complementarán a los logros académicos. Mientras que el 42% de los encuestados piensa que el conocimiento académico será fundamental.

El especialista en educación Gabriel Sánchez Zinny es presidente de Kuepa, una iniciativa para introducir nuevas tecnologías en la educación latinoamericana y autor del libro Educación 3.0. La lucha por el talento en América Latina.

Agrega Sánchez Zinny: "En la sociedad del conocimiento del siglo 21, el mercado laboral demanda una combinación de lo que en inglés se denomina hard y soft skills, conocimientos académicos y prácticos. En estas habilidades del Siglo 21 figuran la curiosidad intelectual, la capacidad de adaptarse al cambio, la de trabajar en diferentes culturas y la de identificar y entender problemas, y la de trabajar en equipo".


Shutterstock
Conclusión 4: ¿sólo con el diploma alcanza?

En la escuela del futuro, los expertos se muestran divididos sobre la cuestión de la certificación y la evaluación. El 39% sostiene que los títulos universitarios seguirán siendo el método más importante de la evaluación; mientras que el 37% cree que el diploma tradicional será sustituido por certificaciones profesionales que evalúan habilidades tales como gestión, colaboración y creatividad.

Agrega Sánchez Zinny: "Aquí difiero con la mayoría de los encuestados que sugieren que las habilidades académicas serán menos importantes. Estas últimas seguirán siendo importantes, pero la escuela tendrá que enfocarse también a enseñar habilidades blandas. Lo que realmente es diferente en este nuevo siglo es la necesidad de adaptarse mucho más al cambio permanente que viven casi todas las industrias".