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Jueves 17 de Abril de 2014 - 16:37 hs

Familiares y amigos despidieron a Marisol Oyhanart

Los restos de la mujer, de 38 años, fueron velados e inhumados en el cementerio municipal. Esta tarde, habrá una marcha en el centro de la ciudad para reclamar el esclarecimiento del caso.

Fue una ceremonia sencilla, en la que participaron los familiares más cercanos de Marisol, pero también sus amigos y vecinos. Luego del velatorio, el cortejo fúnebre pasó por la iglesia, donde se realizó un breve responso, y luego los restos de Marisol fueron inhumados en el cementerio municipal.

Esta tarde, a las 16, los familiares y un grupo de vecinos marcharán a la plaza principal de la ciudad para reclamar el esclarecimiento del caso.

El móvil del crimen de la mujer y su autor siguen siendo un misterio. Los policías apostados en Saladillo esperaban saber si la Justicia ordenará un nuevo allanamiento para seguir con la búsqueda del teléfono celular que la mujer llevaba cuando salió de su casa el lunes último para hacer ejercicio físico.

Ayer, Sergio Rachit, esposo de la víctima, fue liberado dado que no se encontraron evidencias que lo comprometieran, tras declarar ante la Justicia y permanecer más de 12 horas demorado e incomunicado en la comisaría local.

El hombre, de 39 años, fue sometido a una revisión médica que determinó que "no tenía" rastros de sangre ni marcas sospechosas en el cuerpo.Tampoco lo comprometieron los resultados de las pericias realizadas al vehículo de la pareja, la vivienda que compartían junto a sus tres hijos de 5, 9 y 15 años, y el galpón de la distribuidora familiar de leña y bebidas.

Ayer, los resultados preliminares de la autopsia realizada al cadáver de Oyhanart en la Asesoría Pericial de La Plata confirmaron que tenía golpes en el cráneo, la cara y otras partes del cuerpo, y que "no fue víctima de un ataque sexual".

Los peritos forenses estimaron que la muerte de Oyhanart se produjo entre las 21 del lunes y las 2 del martes, cuando el esposo ya había realizado la denuncia de la desaparición y la Policía buscaba a la mujer, quien era docente pero no ejercía porque trabajaba en la distribuidora familiar.