El escándalo por los intentos de Farmacity de expandirse a provincia de Buenos Aires puso en alerta, nuevamente, a Santa Fe, donde la cuestionada empresa intentó en dos oportunidades hacer pie, aunque sin éxito. El actual senador por Rosario y ex ministro de Salud de la provincia, Miguel Cappiello, contó por LT10 cómo terminó “echando” de su despacho a lobbystas de la firma.
El ex funcionario precisó que Farmacity intentó aterrizar en la bota en dos oportunidades: una en 2009, cuando él era ministro de Salud, y la segunda, en 2016, cuando Miguel González estaba a cargo de dicha cartera. “Ellos han querido entrar a la provincia, no sólo de Santa Fe, sino también la de Buenos Aires, ahora, y a Mendoza”, dijo al programa El Cuarto Poder.
El rol de Quintana
Cappiello aseguró que Farmacity empuja su expansión nacional haciendo valer “no sólo el poder económico sino también político” y, en ese sentido, advirtió que la firma está a un paso de lograr su cometido en provincia de Buenos Aires si la Corte Suprema falla a su favor, “aprovechando que el mayor accionista es el vicejefe de Gabinete de la Nación (Mario Quintana)”.
Echados del despacho
El legislador relató la primera llegada de representantes de Farmacity a la provincia de Santa Fe durante su gestión como ministro de Salud en el año 2009. “Vinieron los abogados de esa empresa, y cuando se les explicó cuál era nuestra ley y cómo teníamos que regirnos desde el Ministerio, se enojaron bastante”, comenzó diciendo.
“Yo les dije que podían abrir farmacias en Florencia (en el límite con Paraguay), la reunión terminó bastante mal porque me levanté, les abrí la puerta y les dije que la entrevista había concluido”, continuó el ex ministro.
Planteos judiciales
La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Santa Fe, Adriana Cuello, confirmó a LT10 la existencia de dos planteos judiciales contra Farmacity en la provincia que, precisamente, datan de 2009 y 2016. La profesional lo comparó con un gran supermercado de medicamentos que luego acapara todo el mercado. "Una vez que empiezan a cerrarse las pequeñas farmacias de barrio ellos ponen el precio", explicó.