El Sevilla dio hoy un paso importante hacia las semifinales de la Copa del Rey al ganar 2-1 en su visita al Atlético de Madrid, mientras el Valencia afianzó sus opciones con una sufrida victoria ante el Alavés en casa por idéntico resultado.
La ida de los cuartos de final del torneo copero se abrió con dos choques apasionantes. El Sevilla llegaba en crisis al Wanda Metropolitano y se fue tremendamente reforzado.
La primera parte fue pareja, aunque el equipo de Diego Simeone tuvo mejores ocasiones a nivel global. La segunda mitad comenzó con incertidumbre, pero acabó con pleno dominio rojiblanco, aunque tuvo que esperar a los 73 minutos para adelantarse con un gol de Diego Costa con un espléndido zurdazo.
El Atlético era el dueño del partido ante un Sevilla que parecía hundido físicamente y a merced de su rival. Pero a los 79 minutos llegó el sorprendente gol de Jesús Navas que en realidad fue un regalo de Miguel Ángel Moyá. El arquero local metió dentro un centro que se alejaba.
Y completamente helado se quedó el Wanda Metropolitano a dos minutos del final con un error de Savic en un contraataque del Sevilla que aprovechó el argentino Joaquín Correa para definir con una acción llena de clase.
El Atlético se quedó contra las cuerdas en Copa, una de sus apuestas de la temporada, y el Sevilla rearmó su moral al voltear el marcador justo cuando peor lo estaba pasando. La vuelta promete emociones fuertes, aunque el conjunto andaluz tiene una ventaja más que seria.
Por su parte, el Valencia sudó lo indecible para ganar 2-1 al Alavés después de remontar un tanto en contra y cuando su rival ya estaba con inferioridad por la expulsión de Diéguez.
El Alavés ya amenazó de sus intenciones en la primera parte, cuando firmó un par de ocasiones clarísimas, y rentabilizó su buen juego a los 66 minutos con un gol de Sobrino con un espectacular disparo.
El Valencia igualó a los 73 minutos con una concesión del arquero Antonio Sivera que aprovechó Gonzalo Guedes. Y cuatro minutos después el Alavés perdió a Diéguez al ver su segunda tarjeta amarilla.
El Valencia se fue entonces con todo al ataque y culminó la remontada a los 82 minutos con gran tanto de Rodrigo, un triunfo que al equipo de Marcelino García Toral le sabe más que bien por todo lo sufrido.