La localidad de Emilia se encuentra a 65 kilómetros de la capital santafesina. Zona de estancias y campos. De gente de pocas palabras, de gente solidaria, de gente de pueblo.
Tierras en la que se asentaron inmigrantes para dedicarse a la agricultura, ícono del “crisol de razas”.
Emilia hoy despertó diferente. Bajo un “silencio profundo”, según posteaban sus habitantes en Facebook. “El pueblo se siente diferente, tenemos anulada la voluntad”, compartían.
Es que anoche, Jésica Ronsoni, de 24 años, fue asesinada de dos disparos, en un hecho confuso por el que su pareja está detenida.
El pueblo siente pena porque mataron a Jésica, una niña a la que vieron crecer, jugar en la plaza, convertirse en maestra.
“Era una persona bondadosa, que tuvo una vida difícil”, cuentan los vecinos sin poder asimilar todavía la noticia. Recordando que Jésica hizo muchos sacrificios para poder estudiar, que su condición era humilde pero “siempre la luchó para seguir” contenida por la gente del pueblo que le brindaba ayuda para viajar a Nelson a cursar la carrera de Formación Docente.
Vivía hace dos años en pareja en Santa Fe y daba clases en las escuelas Beleno y San Cayetano.
Emilia hoy la llora. Y en el Centro de Jubilados donde la están despidiendo hablan de su simpatía, del gran esfuerzo que hizo para salir adelante, y recuerdan una historia dura.
A Jésica la crió su papá, que es camionero y se enteró de la muerte de su hija mientras juntaba piedras en las canteras de Córdoba, junto a su abuela Teresa, quien fue su figura materna. “Teresa fue una persona esencial en su vida”, dicen los amigos. “Nos cuesta aceptar esta muerte”, repiten.
Cuándo aún hay muchas preguntas sobre lo sucedido en Av. Circunvalación y Teniente Loza y sobre quien disparó esos dos tiros que terminaron con su vida, en su pueblo, desolados, la despiden.
Esta mañana, en el prograa Todo Pasa, el cura párroco Diego Bertero recordó que Jésica “había tenido una vida dura pero tenía mucha fortaleza y siempre iba para adelante por eso esta noticia es tan triste. Ella era muy querida”.