Cultura - Teatro musical

Martes 23 de Agosto de 2016 - 09:22 hs

“Espíritu Traidor” se despide este fin de semana

La obra dirigida por Rubén Viani, se presentará hoy a las 22.30 y este domingo 28 de agosto a las 20, en la Sala Mayor del Teatro Municipal “1º de Mayo”.

Actualizado: Sábado 27 de Agosto de 2016 - 16:30 hs

Si en cada interpretación, el teatro tiene la capacidad de interpelar de diferentes maneras al público, invitando a percibir nuevos puntos de vista y emocionarse, la reposición de “Espíritu Traidor” será para los espectadores una nueva oportunidad, la última, para dejarse conmover por la trama que desata el regreso de Redo Arias, en la versión libre de “Sueño de una noche de verano” de W. Shakespeare, contada por artistas santafesinos en clave musical.

En 2015, la obra producida íntegramente por la Municipalidad fue uno de los acontecimientos culturales de la ciudad, reuniendo en el escenario y el foso de la orquesta, y en cada aspecto escenotécnico de la puesta a talentos locales; dirigidos con mano maestra por Rubén Viani, a partir del texto escrito por Joaquín Bonet, con música compuesta y dirigida por Francisco Martínez Castro. 

Así, después de ocho funciones a sala llena en el Teatro Municipal “1º de Mayo” y una presentación memorable en noviembre, en Costanera Oeste, para celebrar el aniversario de Santa Fe, la obra se despide del público. A las de este jueves y viernes se suman las del fin de semana: el sábado 27 a las 22.30 y el domingo 28 de agosto a las 20, siempre en la Sala Mayor del Teatro ubicado en San Martín 2020.

Las entradas están en venta en la Boletería, a un valor de: plateas y palcos, 300 pesos; plateas y palcos para estudiantes y jubilados, 250 pesos; tertulia tercio medio, 200 pesos; generales, 100 pesos.

Elenco y orquesta

La obra contará una vez más con las destacadas interpretaciones de Tavo Angelini, Luciana Tourné y Rubén Von der Thüsen en los roles protagónicos de Redo, Florencia y Martín, respectivamente; junto a Lucas Ranzani (Oreja), Camilo Céspedes (Morsa), Demián Sánchez (Ladri), Juan Candioti (Espinillo), Federico Celario Ocampo (Vetusto), Daniela Romano (Tiziana), Magalí Airala (Aldana), Martina Ponce Couré (Rocío), Guillermo Ibáñez (Jhonny), Julián Reynoso (Leo), Marisa Oroño (Marta) y Mirta Rossi (Edna).

Los únicos cambios respecto de la puesta original son en el ensamble de bailarines y en la banda que interpreta la música en vivo, además de las voces que se suman al coro. Así, el ensamble de bailarines está integrado por Yasmin Ríos Satuf, María Jimena Gómez, Julieta Taborda, Mariel Barcos, Lucila Balocco, Cecilia Romero Kucharuk, Juan Pablo Porretti, Federico Wild, Franco Benítez, Maximiliano Sena, Matías Forconi y Francisco Machado; a los que se suman Jesica Cejas, María Susana Rivera, David Gabriel Leonhardt y Gastón Gómez. 

El coro se compone con las voces de Mauricio Oromez, Agustín Ferrero, Elizabeth Schmidhalter, Luciana Braunstein y Lorena Niere; a los que se integrarán en estas funciones Aldana Eve y Rubén “Tato” Pastor. La música será interpretada en vivo por María Fernanda Lagger y Pablo Marcelo Aristein en saxo, Luisina María Gioria en flauta, Luciano Stizzoli en el piano, Nicolás Yozía en guitarra, y Julia Avvedutto en cello. A ese grupo se suman en estas funciones José Alaluf en bajo, Bruno Gramaglia en la batería, y Rodrigo Martínez Castro en flauta traversa y guitarra acústica.

Creativos

En el equipo creativo dirigido por Viani, trabajan Barby Ostrovsky en coreografía, Magalí Acha en el diseño de escenografía; Rodrigo Martínez Castro en las orquestaciones junto al director musical, y Guillermo Pérez en diseño de sonido. Pablo Borato es el iluminador, Alicia Ortiz y Cecilia Romero Kucharuk, realizan la asistencia de coreografía, Luciano Stizzoli es el pianista en los ensayos y Mauricio Oromez el preparador vocal residente.

Viani y Oscar Peiteado diseñaron la planta de luces, mientras que Lucía de Frutos diseñó el vestuario, con la asistencia de Mercedes Barone; y cuenta con la colaboración de Evangelina Rolón y Evelin Medina (meritorios de vestuario). Melisa Guerrero realiza el maquillaje y caracterización, y Gastón Gerstner hizo lo propio con las pelucas y peinados. La realización de escenografía estuvo a cargo de Leonardo Rusillo, David Lencina, Melisa Guerrero y talleres municipales que dependen de la Secretaría de Obras Públicas.

Canciones, enredos y pasiones

En la sinopsis de esta versión libre de “Sueño de una noche de verano” de W. Shakespeare, Joaquín Bonet sitúa la historia en el entorno natural de la isla, en la que habitan espíritus en lugar de duendes como ocurre en la trama del escritor inglés. “Convocados por unos incautos que juegan al juego de la copa, los espíritus buscan pagar sus deudas pendientes. Mientras se divierten con los humanos generando una serie de enredos, se develarán pasiones escondidas y viejas traiciones”, adelanta el autor.

“Con algo de scary movie, esta comedia musical conserva la estructura de la obra clásica, pero sus personajes son muy diferentes al original: Redo Arias, una estrella de rock regresa a su ciudad. Veinte años atrás había huido después de descubrir a su novia y su mejor amigo besándose. Esa traición marcó su vida, y aunque siempre quiso volver a la casilla en la que su padre se sentaba a pescar, su dolor le impedía regresar. Sus canciones, llenas de furia, se transformaron en un éxito y Redo desarrolló una gran carrera. Fue la forma de curar aquella herida”.

Su regreso a la ciudad, marcado por la gloria y el éxito, responde en verdad al deseo de volver a ese paisaje litoraleño que lo vincula a su padre. Pero Redo, advierte finalmente Bonet, “ignora que la noticia de su regreso ha despertado planes inesperados en alguna gente que lo conoció en otro tiempo”. En esta trama, “se mezclan viejas canciones, enredos, pasiones, deseos ocultos y espíritus atrapados en una noche de verano en la isla. Todo puede pasar, la magia está en el aire”.

Audio: Patricia Pieragostini

Fuente: santafeciudad.gov.ar