Así operaba la banda que “exportaba” travestis para prostituirlas

El cirujano santafesino detenido operaba a las mujeres trans que venían de provincias del norte y terminaban en Buenos Aires y Europa. Las hacían adictas a drogas y les pagaban las cirugías para obligarlas a devolver el dinero. Un hotel porteño funcionaba como “centro de distribución”.

trata de personas

La detención del cirujano santafesino de 66 años el pasado lunes en pleno barrio Candioti sería un elemento clave en la investigación de la justicia federal de Ciudad de Buenos Aires para desbaratar una red internacional dedicada a la trata de personas y la venta de estupefacientes.

 

Zaida Gatti, coordinadora del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a Personas Damnificadas por el Delito de Trata relató al programa El Cuarto Poder cómo operaba la banda y qué sucedía con las personas trans que caían víctimas de la misma.

Mercancía para exportación

Gatti contó que las víctimas provenientes de provincias del norte argentino eran llevadas a Capital Federal y, desde allí,  llevadas a Europa, en especial a Paris y Roma, para ser explotadas sexualmente.

En ese contexto, el cirujano santafesino detenido el lunes sería “partícipe” de la maniobra y, según la entrevistada, “apareció como dato novedoso”.

El profesional, “se ocupaba de hacerle la cirugía a quienes consideraba mejor mercancía para la exportación”, aseguró.

“Es crudo, pero estamos hablando de una red internacional, víctimas muy vulnerables, expulsadas de sus hogares por su elección sexual, esto las deja a la deriva”, por lo cual serían fácilmente captadas por estas redes.

Centro de distribución

Según el relato de la funcionaria, el hotel Gondolín, ubicado sobre la calle Aráoz 924 (en Capital Federal), funcionaba como lugar de alojamiento para las mujeres trans, previo a su salida del país para ser explotadas sexualmente en Europa.

“Lo que funciona como centro de distribución es un hotel regenteado por alguien de la organización. Mucho tiempo las dejan solas pero siempre a la mirada de alguna persona encargada”, indicó en declaraciones a LT10.

El Hotel gondolin aparece en todos los relatos de las victimasy desde el comienzo de la investigación fueron entrevistadas más de 100 víctimas que fueron alojadas allí.

Gatti destacó que todos los lugares para cometer “este tipo de delitos funcionan a la vista de todo el mundo”, y en ese marco, “lo más secreto o disimiulado era el centro de cirugía” que funcionaba en la ciudad de Santa Fe.

Además, expresó que “la cabeza de la organización se mueve permanentemente”, por lo cual “la investigaciójn lleva muchísimo tiempo y siempre aparece un nombre nuevo”.

Ante diplomáticos

Gatti agregó que el tema llegó a ser analizado con diplomáticos franceses para intentar ayudar a las trans argentinas que eran llevadas allí para prostituirse.

“Hace tres años o cuatro hemos llegado a hablar con autoridades de la Embajada de Francia porque muchas víctimas quedan allá, no aceptaron asistencia para regresar al país pero tampoco el Estado francés le podía garantizar asistencia, por lo cual han quedado en situación de prostitución en París”, explicó.

Víctimas adictas

La investigación de la justicia federal porteña apunta al delito de trata de personas con fines de explotación sexual pero también a la venta de estupefacientes. Esto se debería al consumo de drogas al que muchas trans eran ingresadas para manipularlas con mayor facilidad.

“Nos encontramos con una red grande, con víctimas con adicciones y dependencia económica”, admitió Gatti.

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Según la funcionaria, es muy fácil captar una víctima vulnerable como lo son personas expulsadas de su familia (generalmente de escasos recursos) por su elección sexual.

“El primer caso que detectamos es de 2010: se trataba de una víctima de 17 años que venía de Salta con una promesa de trabajo porque su familia no había aceptado que quería ser mujer”, contó.

Cirugías

Gatti precisó, además, que “las organizaciones de trata siempre funcionan haciendo a la vítima deudora y en este caso se le añade el costo de la operación” a la que eran sometidas en una clínica de Santa Fe. "Les ofrecen acompañarlas en la operación y es una deuda que tienen que pagar a futuro", aclaró.

“Es una orgnización delictiva que se dedica a la trata de personas y a la venta de estupefacientes porque las hacen adictas”, apuntó.

Incluye el traslado a dos países de europa donde son explotadas sexualmente

Finalmente, la funcionaria pidió difundir la línea 145 nacional y gratuita. “Es muy importante para que estas bandas dejen de operar”.

Audio: Zaida Gatti - Coordinadora del programa nacional de rescate y acompañamientos de víctimas de trata

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